El Velódromo del Tirador es un espacio urbano largamente reivindicado por el vecindario. Por este motivo, el proceso participativo se ha centrado en recuperar su historia y convertirlo en un parque de uso público que responda a las necesidades de todas las personas.
Partiendo del anteproyecto de la arquitecta Isabel Bennássar, y en colaboración con El Globus Vermell, se han organizado marchas exploratorias, talleres y sesiones de trabajo en centros educativos que han servido para recoger propuestas sobre la conservación del patrimonio, la vegetación, los espacios de juego y deportivos… Un conjunto de ideas que esperamos tengan cabida en esta nueva zona verde de la ciudad.